Suele el hombre aprehender el mundo a partir de la noción de tiempo; ordenarlo conforme a un antes y un después, con base en un presente, un pasado y un futuro. En este ensayo Norbert Elias concibe el tiempo como un fenómeno que depende de organizaciones sociales y se da a la tarea de reconstruir su historia e identificar los momentos claves que han cambiado nuestra forma de percibirlo. Mediante la observación antropológica de las comunidades "primitivas", Elias evalúa la experiencia del tiempo desde el fenómeno básico que nos lleva del día a la noche y del frío al calor, hasta la exacta sucesión de segundos que rige nuestros días. Elias insiste en que el tiempo no pertenece al mundo natural sino que forma parte de una "quinta dimensión": la social. Para él, el tiempo no solo es un símbolo humano, una abstracción que nos permite medir los cambios a nuestro alrededor, sino también -y sobre todo- una herramienta para organizar las sociedades. El ensayo de Norbert Elias Sobre el tiempo ocupa un lugar destacado entre sus estudios sociológicos, por cuanto formula y desarrolla aquí algunas de sus principales opiniones sobre un tema central de nuestra tradición cultural. De modo particular pretende demostrar que lo que llamamos tiempo no es ni un dato a priori de la naturaleza humana (Kant), ni una propiedad inmanente de la naturaleza no-humana, sino más bien el resultado de una síntesis humana que solo puede entender quien la refiera a ciertos procesos sociales. La experiencia del tiempo, tal como se vive hoy en día, se diferencia de estadios más primitivos del desarrollo de las sociedades por la continuidad. Mientras que las sociedades primeras delimitaban el tiempo de acuerdo con sus necesidades, siguiendo ciertos momentos y ocasiones, las actuales disponen de una retícula rigurosamente subdividida en unidades temporales, trabadas entre sí: las horas, los días, los meses, los años, etc. Dicha retícula domina toda su vida. La presencia omnímoda y la fuerza del sentimiento del tiempo que de ello resulta contribuyen poderosamente a que experimentemos el "tiempo", aun sin quererlo, como algo independiente que existe por su cuenta. Este ensayo de Elias ejemplifica las dificultades con que se enfrenta el desarrollo de los medios y símbolos de la orientación humana en su afán por llegar a un plano superior de síntesis, que Elias ha ido elaborando a través de diversos conceptos del "tiempo".
Prólogo a la tercera edición en español, por Héctor Vera 9 Nota de la edición alemana 23 Prólogo 27 Sobre el tiempo 59
Colección: Filosofía
Formato: 13,5 x 21 cm., 212 pp.
Primera edición: 1989
Última edición: 2010