Este libro es la historia de la occidentalización de América Latina y describe los procesos que, en el periodo transcurrido desde el descubrimiento de América en 1492 hasta la actualidad, han obstaculizado o favorecido la convergencia entre las áreas latinoamericanas y europeas, y entre éstas y los demás continentes. En él se analizan las interacciones económicas, sociales, políticas y culturales que han llevado a los actores latinoamericanos a elegir determinadas opciones colectivas y a convertirse en sujetos activos en el proceso de occidentalización. La occidentalización de las áreas latinoamericanas es una historia global, supone relaciones entre distintas dimensiones regionales, nacionales y estatales, y entre las áreas latinoamericanas y el resto del mundo, de lo cual resulta una red de interacciones. Este libro de historia internacional no se limita a considerar las relaciones diplomáticas bilaterales o multilaterales, sino que también abarca los contactos informales derivados de la proyección de los actores históricos en la esfera internacional, expresada, por ejemplo, en la religión, la lengua, la cultura material o la emigración. El texto analiza cómo el subcontinente y el mundo inventaron un recorrido que acercó las áreas latinoamericanas a las ibéricas y occidentales, y cómo todas ellas se vieron sometidas a un influjo recíproco. Se intenta mostrar cómo los latinoamericanos y los no latinoamericanos fueron creando de manera gradual la convergencia de las áreas americanas y europeas en torno a determinadas formas de comportamiento y de organización social, normas jurídicas, formas políticas y mecanismos económicos y sociales comunes, hasta llegar a la occidentalización.
Colección: Varias
Formato: 16,5 x 23 cm., 432 pp.
Primera edición: 2004
Última edición: 2011