Estos tres raros “encuentros” de sensualidad inquietante y misteriosa surgen en medio de lo ordinario de todos los días. Pero su cotidianidad nace de una suerte de revelación: vida vista como realidad tangible; vida vista también como horizonte de mundos ocultos, silenciosos, de donde brotan las palabras. Universo real y posible, firmemente trazado y oníricamente indicado, exacto. Dijo alguna vez Jean Paul que la vigilia es la prosa en tanto que la poesía es el sueño. En estas narraciones de Juan García Ponce el sueño se hace vigilia para que la vigilia pueda convertirse en sueño.
Colección: Letras mexicanas
Formato: 11 x 17 cm., 111 pp.
Primera edición: 1972
Última edición: 2001